Abril, te tengo que aguantar

¡Aunque no quiera!,
¡Aunque no pueda!,
¡Aunque reviente!,
¡Aunque me muera!
¡Paracaidista!
- Lema de los Paras Méxicanos

A veces la vida nos pone las pruebas más difíciles, las pruebas que todos pensamos que no vamos a aguantar, a veces nos quita todo lo que más deseamos. En mi caso, siempre pierdo a los seres que más quiero. Esas pérdidas duelen en lo más íntimo del espíritu.

Ya casi no queda nada entre él y yo, mi tiempo está agonizando y el de ellos está comenzando. Ya casi no queda nada, solo dos veces más podré verlo y luego, inevitablemente vendrán las ganas de llorar hasta quedarme dormida. Yo se que desearé no despertar.

Hoy es 6 de abril, y en lo que va del mes, sólo lo he visto unos minutos nada más, ya no puedo mandarle mensajes a su cel, tan solo pienso en él con la confianza que mi pensamiento viaje en el viento así como él me dijo un día, que viaje hasta él y donde quiera que esté, sienta mi beso en su frente. Que sienta el beso de su gatita pequeña que tanto lo quiere.

Agradezco las próximas veces que lo veré, porque después ya no quedará nada.
Fuí bendecida y ahora lo agradezco. Elliot tenía razón!, "Abril es el mes más cruel".

Abril se lleva a mi Arcángel, se lo lleva entre sus días confusos de calor y tormentas.

Esta es otra prueba que la vida me pone, pero yo se que puedo nadar hasta la superficie. Aquí, en el fondo de estas aguas tan tristes, ya no hay formas de vida que me hagan compañía, pero sé que puedo emerger y continuar. Con el tiempo volveré a estar con la moral arriba de 10,000 pies. Lista para volver a descanzar entre las nubes. Además le prometí a mi Arcángel que no volvería a bajar la mirada tanto tiempo, yo sé que le duele, yo se que me quiere, yo lo se. Aunque ya no me lo diga.

Un día él me escibió "Pedacitos de mi ... ", me conmovió. Y le dije "Pedacitos de ti,
pedacitos de mí y no hay forma de unir nuestros restos".

Yo no se cómo le voy a hacer para resistir, pero lo haré.