Mi Abuelita se fracturó la cadera :(

Ayer fue un día de locos. Me levanté a las 0430 porque tenía que manejar desde mi casa hasta Santa Tecla para llevar a mi hermana al Rosales, porque le iban a hacer una transfusión de sangre por la razón de que ella tiene la hemoglobina demasiado baja aparte de su condición de paciente de Insuficiencia Renal Crónica.

La dejé en el hospital y me vine para la oficina, aquí mi jefe pasó encabronado todas las horas de la mañana por razones exóticas, y digo exóticas porque nunca nos enteramos qué lo encabronó.

A las 1100 me llama mi mamá diciendo que mi abuelita preciosa se había caído y que estaba mal. Mis abuelos viven en Los Lagartos, en el “quinto culo” camino a Sonsonate, allá por San Julián. inmediatamente le marqué a mi viejita linda divina y me dijo que se había deslizado en la cocina porque vio una masacuata colgando de una viga.

Mi abuelita creía que era quebradura porque le dolía demasiado y no estaba equivocada. Fue clara en decirme que no quería que la fuera a traer en mi carro porque era muy estrecho y que no podía ni sentarse, me dijo que quería que le pagara un pick up para llevarla al hospital del ISSS de Sonsonate o que le consiguiera una ambulancia y que también quería que mi abuelito viajara con ella porque él también está enfermo y no podía quedar solo porque no habría nadie para estarlo cuidando allá tan lejos en el cantón.

Mi mamá tenía sus propios planes, quería que trajéramos a la abuelita al Hospital General del ISSS, pero no en pick up sino que en mi carro, eso era algo completamente distinto a lo que mi abuelita tenía en mente, y yo tenía que buscar la solución más adecuada que no enojara ni a mis abuelitos ni a mi mamá y que cumpliera con el objetivo que era traer a la abuelita al hospital. Traté de conseguir la ambulancia con la Gente de Punto Seguro y nácaras.

Las limitantes eran que no podían irse para el hospital de Sonsonate porque mi mamá y mi hermana viven en Santa Tecla, y el padecimiento de mi hermana es delicado y no puede pasar mucho tiempo sola. ¿Allá quién cuidaría a mi abuelito? Tendría que venirse a ley. No podían venirse en mi carro porque en el Eclipse no cabe mi abuelito por los bastones y mi abuelita porque no podía venir sentada.

Mi jefe estaba ensatanado y no me iba a dar permiso para faltar la tarde por ningún motivo porque ayer vine tarde a causa de los exámenes que me estoy haciendo para ver si a mi hermana le queda un riñón y trasplantarla.

Así que pensé un par de minutos en una solución y las cosas quedaron así:

Primero que nada, hablar al cantón con un señor que hace viajes en pick up para coordinar el transporte desde allá para San Salvador, ya que aquí todo estaría más cercano que en Sonsonate, luego esperar a que a mi hermana la trasfundieran en el Rosales, llevarla a Santa Tecla y que se quedara sola un rato mientras mi mamá se iba para Los Lagartos a traer a los abuelitos. Justo así se hizo. Mi hermana salió a las 1200 del Rosales, la fui a dejar, le di el pisto a mi mamá viajara en bus para el cantón y pagara el pick up y que mis abuelitos vinieran con compañía de su hija en el trayecto hasta San Salvador. Luego regresé a la oficina. Y mi jefe, con justa razón, estaba queriéndome matar por regresar a las 1330.

Cuando salí del trabajo, tipo las 1700 horas me fui a traer unas llaves a mi casa, allá por la Gloria. Cuando iba pasando a la altura de un redondel de la prolongación de la 75, sentí el deseo de ver hacia mis 10 en punto. Entonces alcancé a ver un carro parecido al de mi Amor Imposible y creo que aluciné, porque por un par de segundos creí que era él, pese a que solo vi una sección de su rostro, oreja, lentes y parte del mentón. Para variar… como dice la canción “yo no sé si su recuerdo me hace bien o me hace mal”. Eso me desestabilizó bastante y terminó complicándome más mi estrés (> - <)

Continuando con la historia, habíamos quedado con mi madre de que yo los esperaría en la entrada de emergencia del Hospital General.

Pasaba el tiempo y no aparecían, yo esperaba a que llegaran en el pick up del viejito porque ya lo conozco, pero de repente aparece un gran camión de esos de pueblo entrando por el portón de la emergencia del hospital, traía 5 cabrones a bordo y me quedé pensando “ve esos majes parece que son del cantón” y cuando voy viendo que venía mi mamá hecha puñito en una esquina y mi abuela acostada bien galán sobre una colchoneta en la cama del camión! Y salgo rápido a tratar de ayudar para bajarla.

Los cinco hombres que venían en el camión son los ahijados de mis abuelos que viven en el cantón y vinieron desde allá para ayudarle a mi abuelita.

Y cuando voy viendo allí venía también mi abuelo que se suponía lo dejarían primero en la casa de Santa Tecla.

Y mi abuelo con su par de bastones en la cabina saca la cabeza con su sombrero de palma y me grita “Hey vení a bajarme de esta mierda, quiero ayudarle a mi mujer” y me voy donde él y como pudo se bajó y traía una canasta tapada y me dice “tomá y tené cuidado con esto”, entonces yo le dije “¿y qué es?” Y muy serio me responde “es el perico” y comencé a matarme de la risa al igual que tooooda la gente que estaba observando afuera de la emergencia jajajaja y le dije “¿y por qué se trajo al perico? Y me dice muy seguro “porque se lo puede comer la masacuata que anda en la cocina” jajajajaja Me encanta la naturalidad de mis viejitos!

Pero esa fue la parte simpática, la parte seria fue cuando tratamos de bajar a mi abuela, le dolía su cadera. Los médicos habían puesto la camilla paralela a la salida de la cama del camión y así era más difícil, se me ocurrió bajarla con todo y colchoneta, era lo más lógico. Puse la camilla perpendicular a la salida del camión, así solo elevamos la colchoneta para que quedara acostada en la camilla y la atendieron inmediatamente. Le hicieron radiografías y resultó que se quebró la cadera mi pobre viejita linda.

Pero, como siempre toca esperar, estuvimos allí hasta que aparecieron los ortopedas, de repente iban un par de médicos hablando acerca del accidente del Chuky, y para coincidencia y asombro mío, la doctora estaba diciéndole a los demás médicos que ella lo había recibido y que fue ella la primera que lo atendió (claro, yo poniendo atención sin decir nada, hasta después me acerqué y le pregunté) y dijo algo bonito acerca de Fernando, dijo "Ese niño me sorprendió. Venía en shock por la pérdida de sangre, pero en ningún momento perdió la conciencia, hablaba y entendía todo y no hablaba incoherencias". También estaba diciendo algo muy interesante, dijo que en la madrugada después ella soñó con él y que aún sigue soñando que platica con Fernando.

Después de estar escuchando un buen rato entablé charla con ella. Yo cargaba en mis papeles la foto de Fernando que me regaló Don Will (el papá) y le comenté a la doctora que yo cargaba esa foto entre mis papeles y me dijo que se la mostrara, en eso estábamos cuando se acercó un doctor y dijo “hey este que no es el hijo de Will, el que corría carros”. “sí “ le dije yo, es él. Y dijo la doctora “él es el paracaidista del que estábamos hablando ahora” Y me dijo el doctor “Yo soy de Izalco, y cargo el Santo Entierro todos los años y este muchacho siempre cargaba, hasta erizo me pongo” dijo el doctor, dijo que conocía al Chuky desde cipote y que lo consternaba saber que el paracaidista que supo aguantar el dolor en el hospital era en realidad el joven que cargaba la Urna de Izalco y que era el hijo de su amigo. Dijo el doctor que el próximo año, el Viernes Santo, tipo 0300 de la madrugada le harán un tributo frente a la casa de los Calvo en Izalco, dijo que hacen ese ritual cuando un miembro de la Hermandad del Santo Entierro fallece.

Muy bonito haber conocido a esos doctores, me alegró y seguí confirmando que nuestro Chuky no nos abandonará nunca.

Yo quedé impresionada con la coincidencia, ¿casualidad?, causalidad?

Al fin de cuentas, a mi abuela le dieron cama en el 6 piso del Hospital General del ISSS, la van a operar de la cadera, ella tiene 82 años y espero que resista la cirugía. Tengo miedo, pero también tengo confianza.

Salí del hospital en la madrugada, solo dormí un par de horas, luego me tocó levantarme temprano, venir a trabajar, hacer mi trabajo lo mejor posible.

Ya la fui a ver, está estable y dice que le va a hacer huevos a la operación. M

i hermana se tuvo que quedar solita y enfermita con mi abuelito y el perico allá en Santa Tecla, me mudaré unos días para allá y así cuidaré a mis enfermitos.

Estoy cansada, quiero dormir, perdón por aburrir con tanta cosa, pero quería desahogarme de todo lo que me ha mantenido presionada.

Y para variar, ahora tengo que estar participando en un recital poético en La Rayuela, será del día de la Madre y este tema me afecta mucho porque yo nunca he podido ser madre, me duele no poder tener un hijito para que me llame mamá.

En la foto: Mi abuela y Pericles.